El Big Data es una tendencia que está en auge y en este momento, muchas organizaciones lo están utilizando para manejar y estructurar sus datos de forma que este le permita obtener mayor información, y así, realizar un análisis de su negocio, y tomar decisiones estratégicas del rumbo que tomara su empresa.

Todas las tendencias que salen hoy en día, como los milenians, los avances tecnológicos, el IoT (Internet Of Things) y qué gracias a estas, idealizábamos un mundo ideal para nosotros mismos. Me hace reflexionar en como antes veíamos los avances tecnológicos y como los vemos ahora.

Cómo, por ejemplo, el 21 de octubre de 2015, los fanáticos de la cinta “Volver al futuro”, conmemoramos el día en que Marty McFly efectivamente volvió al futuro, usando la máquina del tiempo creada por el doctor Emmett Brown. La fecha sirvió como pretexto para reflexionar sobre las expectativas que se tenían hace 30 años con respecto al impacto de los avances tecnológicos en la sociedad. Ciertamente, fue desalentador ver como el cambio en algunos aspectos resultó prácticamente nulo. Nada de autos voladores o tenis que se amarran solos. No, nada de eso. Pero hubo algo que sí cambió radicalmente. Fue la forma como los seres humanos nos comunicamos, obtenemos y generamos información.

¿TELÉFONOS INTELIGENTES?

Internet fue la innovación que Robert Zemeckis no vio venir. Hizo universal el acceso a cualquier tipo de información. De ahí en adelante todo ha sido una montaña rusa. Las redes sociales hicieron posible compartirla con cualquier persona alrededor del mundo. Luego los teléfonos inteligentes nos permitieron acceder desde cualquier lugar, en cualquier momento. Además de permitirnos generarla, pues ese aparato lo es todo: cámara fotográfica, de vídeo, grabadora, radio, televisor, computador, GPS, biblioteca, consola de vídeo juegos y porque no, teléfono. ¿Cuánta información disponible para acceder y compartir, cuanta por generar? En tan solo 60 segundos, se publican más de 100.000 trinos, se suben más de 50 horas de vídeo a YouTube o se envían más de 170 millones de correos electrónicos.

Hasta hace un tiempo, se decía que quien tenía la información tenía el poder. Eso ha cambiado, ahora cualquiera tiene la información. El poder ahora lo tiene quien mejor la explote. Y es Big data el camino para hacerlo. Es el campo dedicado al análisis, procesamiento y almacenamiento de enormes colecciones de información de variadas fuentes. Es la herramienta para explotar esta mina llena de diamantes esperando a aquellos que quieran meterse al socavón.